
Sandro Rosell se ha entrevistado con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, en la sede de la Mouqata Los palestinos se muestran optimistas por la celebración del partido pero advierten que deberán superar algunos obstáculos
Pasión azulgrana en Ramallah
La estancia de la expedición del FC Barcelona en Ramallah, capital de Cisjordania, ha estado rodeada por las demostraciones de sentimiento azulgrana por parte de los ciudadanos palestinos. Decenas de aficionados del Barça han esperado a la comitiva en la entrada de la Mouqata y el presidente Rosell ha roto el protocolo de seguridad para acercarse y compartir unos momentos. El presidente del Barça ha agradecido todas estas muestras de apoyo durante su comparecencia con los medios y ha comentado que el presidente Abbas le ha confesado que sus nietos también son del Barça.
La expedición oficial del FC Barcelona, encabezada por el presidente, Sandro Rosell, y el vicepresidente Javier Faus, ha cruzado la frontera entre Israel y Cisjordania para trasladarse a Ramallah, donde se encuentra la Mouqata, sede del gobierno palestino, que lidera el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas. El traspaso de la frontera ha escenificado el puente de paz entre las dos comunidades que el FC Barcelona quiere contribuir a extender con la celebración de un partido de fútbol el 31 de julio en Tel Aviv. De hecho, es la primera vez que una personalidad extranjera es recibida en una misma visita por los presidentes de Israel y Palestina.
El encuentro entre Rosell y Mahmoud Abbas para formalizar la propuesta de organización del partido, en la que también han participado Faus y el general Jibril Rajoub, presidente de la federación de fútbol y del Comité Olímpico Palestino, ha constatado la buena acogida que ha tenido la iniciativa azulgrana entre los palestinos, pero también los obstáculos que deberán superarse para llevarla a buen término. Las tres partes implicadas deberán negociar los aspectos que en estos momentos dificultan la celebración de este partido, entre los que destaca el hecho de que los palestinos exigen a los israelíes que faciliten a su selección la movilidad entre Gaza y Cisjordania. Otra de las condiciones que podrían poner los palestinos es que Israel reconozca a su selección de fútbol, que ya es miembro de la FIFA.
Durante la comparecencia ante los medios de Rosell y el general Rajoub, el presidente azulgrana ha reconocido: "La celebración del partido no es fácil, pero si no lo intentamos no lo conseguiremos. Nuestro gesto es venir y ayudar a un mejor entendimiento entre las dos comunidades". Rosell cree que, de conseguirlo, "nuestro legado no será sólo un legado para la paz, sino también un legado para el fútbol".
Por su parte, Jibril Rajoub ha manifestado: "Soy optimista de que este partido se pueda organizar, pero ahora las tres partes debemos hablar y ponernos de acuerdo. Todavía hay obstáculos para que este sueño se convierta en realidad".
Terminada la rueda de prensa, la delegación del FCB ha asistido a una comida con el general Rajoub y representantes del fútbol palestino. El viaje a Ramallah se ha completado con la visita a la tumba del que fuera presidente de la Autoridad Nacional Palestina y Premio Nobel de la Paz, Yasser Arafat.
De vuelta a Jerusalén, la expedición del FC Barcelona ha visitado la Vía Dolorosa y la iglesia del Santo Sepulcro, dos de los lugares sagrados del cristianismo que se encuentran en esta ciudad. Allí ha sido recibida por el patriarca de la iglesia ortodoxa Teofilus III y posteriormente ha realizado una visita junto con Isaac Herzog, ministro de las relaciones de Israel con la comunidad cristiana.